Ahora Doowap se llama Weikis

Weikis, ahora doowap se llama weikis, ahora doowap se llama weikis, ahora doowap se llama weikis, weikis, weikis, weikis, weikis, weikis.

Han cambiado el nombre de doowap, por el de weikis, han cambiado al perro esquizofrénico, por una mezcla de ardilla y mapache esquizofrénica.

¿El bollo?¿Es el mismo? Eso parece, pero nadie se preocupa por ello, nadie se preocupa por pensar en la integridad del producto, de nuestros derechos como consumidores. Nos ponen una canción pegadiza, que habrá escrito el tonto de la oficina, y ya le pueden haber echado antrax al puto bollito, que nos lo zampamos, porque se llama weikis, y la canción mola mogollón.

No le han echado antrax, tranquilos, es lo primero que comprobé, y los bollitos están tan jodidamente buenos como siempre, pero las cosas no se hacen asi. Yo quise una explicación razonable de este repentino cambio, así que fui a la central de la bella easo, reclamando mis derechos de consumidor, tal vez estaba algo alterado, pero sin importarme lo más mínimo, entré desnudo y con las manos levantadas y pintadas de blanco, me puse a gritarles su demoníaca a la par que preciosa y melódica canción.
Intentaron detenerme, pero entonces me giré y les empecé a tirar sus putos bollitos infestados de sucio capitalismo.

Ante tal escándalo me llevaron a juicio, allí hice mi denuncia pública, expresé todo cuanto pensaba acerca de esta atrocidad. La gente curiosamente me escuchaba, así que me vine arriba, me volví a desnudar y empecé otra vez igual, lo cual no surtió el efecto esperado... me llamaron loco... loco, yo.

Lo único que quiero es defendernos ante estos abusos, están comprando nuestra alma con bollitos impensablemente deliciosos y canciones pegadizas.

Pensaréis que estoy exagerando, que no es para tanto, que ''solo son bollos tío'', pero no solo son bollos, hoy, afortunadamente solo son bollos, pero mañana será la ropa, y pasado mañana los insecticidas, y pasado pasado mañana... no quiero pensar en qué pasará pasado pasado mañana.

Pero siguen estando cojonudos los putos bollitos.

Coño.